miércoles, junio 30

Ellos y Twilight


Me causa una mezcla de curiosidad y extrañeza la reacción tan encendida de muchos hombres ante la saga Twilight (acrecentada en estos días por el estreno de Eclipse). Sobre todo por la dosis de desdén que le imprimen a sus críticas, aun a sabiendas de que es una historia muy femenina. Por lo i-nau-di-to que parecen encontrar que las mujeres (las suyas incluidas, claro) babeen, más o menos, por un quesque-vampiro-que-encima-de-todo-brilla-bajo-el-sol y por un lobito-inflado-que-se-descamisa-a-la-primera. Desdeñan que una parte del sector femenino esté enganchado con furor a una historia que dota de nuevos niveles a lo cursi y lo soso. Se quejan de haber padecido una sala abarrotada de mujeres con la hormona de la fantasía un poco fuera de control. Por ahí uno que otro dice que deshace las películas con la misma precisión que lo haría con cualquier otra. O que sólo son bromas ácidas. Pero todos sabemos que no es precisamente así. Admitamos que algo hay en la historia de Twilight que tensa de más el acuerdo tácito de tú-no-te-metes-con-mis-comics y yo-no-digo-nada-de-tus-chick-flicks: y ese algo son los vampiros. Seres largamente reverenciados en la literatura fantástica, elevados de algún modo a la categoría de intocables que, de la nada, fueron echados a la licuadora junto con una alta dosis de edulcolorante por una gringuita casi-cuarentona con alma de emo. Se entiende. Pero en una época en la que hasta a Jane Austen le toca ser reescrita con zombies de época (Orgullo y prejuicio y zombies), queda claro que el mash-up no es para respetar a nadie. Pero sí para vender. Por millones.

Ahora, antes de proseguir me gustaría aclarar algunos puntos:
1. Opino que las películas están pésimamente realizadas.
2. No me gusta Robert Pattinson, aunque creo que para las teens es un tipo idóneo.
3. Tampoco me gusta Taylor Lutner, alias 'El lobito'.
4. No me enorgullezco de que algunas mujeres se desgañiten en el cine cuando Jakob aparece sin camiseta en pantalla.
5. Leí enteros, y casi de un jalón, los cuatro libros. Y, la verdad, los disfruté. Stephanie Meyer supo conformar con mucha habilidad un arquetipo masculino anhelado por las mujeres. Irónicamente, aún más en tiempos de la supermujer como role model.
6. Ojalá las masas nos desbordáramos por contenidos más sustanciales. Cosa que no es Twilight. Pero entretenerse por entretenerse, que se sepa, todavía no es pecado.
7. No soy una fan alocada. Sólo encuentro harto interesante lo que se ha ido tejiendo alrededor de esta saga.

Dicho esto, procedo a enlistar los argumentos que he escuchado en voz de todo tipo de hombres, en las más variadas situaciones. Y debo añadir que en muchos casos (al menos de mujeres arriba de 25 años), he comprobado que se trata de detalles que se tienen muy, muy conscientes.

La trama es estúpida y las películas están mal hechas. Son una total pérdida de tiempo. ¿Cuántas guy-flicks de trama de poca monta y visualmente pobres no se han hecho y y aún así los hombres han acudido emocionados a verlas? Que haya una mala trama de por medio no afecta el interés en términos románticos (el verdadero gancho de la saga).

El vampiro es supergay y el lobito ese se quita la camisa sin razón alguna. Suena al equivalente de una mujer descalificando a una actriz, cantante o modelo que se cae de buena porque se hizo cirugía. Sumado al hecho de que, con frecuencia, a los hombres les gustan mujeres que las mismas mujeres no encuentran atractivas. Y eso no cambia nada.

Se alborotan demasiado en el cine. ¡Gritan! Habría que preguntarle a una mujer sentada por ahí qué opina de una función llena de nerds disfrazados. Y pensar en cuántos sabroseos hacen los hombres frente a las mujeres, sus parejas incluidas. ¿Por qué no es tan apropiado que las mujeres se dejen llevar por sus impulsos más insulsos y básicos?

Pero si son unos malditos pubertos. Está bien que le gusten a las teens, pero ¿qué les ven las mujeres? Lo mismo que los hombres encuentran en las adolescentes o lolitas. Y habría que decir que los personajes son arquetipos masculinos muy poderosos. Una especie de versión actual y cool del príncipe azul. ¿Y quién dijo que fantasear fruslerías es malo para la salud o propiedad exclusiva de los hombres?

Hay mejores chick-flicks. Difícilmente una mujer dirá lo contrario. Pero ésta ha establecido una conexión sui géneris. Además, hay que ser honestos: ¿quién no se ha dejado arrastrar hasta lo más bajo por una reverenda porquería? ¿Cuántos hombre admiten, por ejemplo, que George Lucas pudo haberse ahorrado las primeras tres partes de Star Wars? Lo cierto es que todos tenemos malos gustos. ¿Por qué menospreciar los del sexo contrario? ¿Por qué tanto alboroto de que manifieste su emoción de forma tan abierta?

Twilight tiene una premisa ñoñísima. Sí, ¿y? Ya sabemos que los móviles atractivos para hombres y mujeres son harto distintos. Las emociones son uno de los principales ganchos femeninos. Y también es un hecho que más de una mujer argumentará que el hombre que lee comics o colecciona juguetes a sus 40 es un nerd/geek irredento o, peor aún, un forever. ¿Y? Dejamos pasar peores cosas.

¿Y qué estupidez es esa de que todos son vírgenes y quieren boda? Se llama tensión romántica. ¿Recuerdan aquello de que mientras los hombres buscan sexo, las mujeres buscan caricias y apapacho? Volvemos al punto: las mujeres tienen una parte cursi, como los hombres una nerd. Big deal!

Es un martirio que sean cinco películas. ¿Cuántas mujeres conocen que consideren que las seis películas de Star Wars, las cuatro de Fast and the Furious o Die Hard son una delicia? Emancipadas, seudoemancipadas o no, el romance siempre vende. Y muy bien. Así sea baratón. Tanto como la escena de una mujer en top y microshorts deteniendo el cofre de un auto.

Pero es que no pueden creer que Twilight es una verdadera historia de vampiros. Quienes antes han leído historias de vampiros, jamás pensarán eso. Aunque la estrategia de mercadotecnia lo promueva así, en realidad, Twilight es una historia de amor ambientada entre vampiros y hombres lobo. ¿Consistentemente? No. Sólo lo necesario para hacer de ella un best-seller. A quienes no hayan leído nada sobre vampiros, les vendría bien un poco de guía en el tema. Seguramente lo agradecerán. O devolverán el libro decepcionadas por la falta de romance. Como sea, alguien saldrá beneficiado al descubrir los verdaderos intereses, ¿no?

A esos nueve puntos se resumen los comentarios que he escuchado a lo largo de meses. En mi opinión, no es sólo uno de ellos lo que trasmina de desdén la reacción de los hombres ante Twilight. Es el combo. Y aunque al hablar al respecto algunos terminan por disminuir el tono de sus críticas o se escudan bajo el argumento de que el tema en realidad no es tan serio, lo es mientras detrás haya aunque sea una mínima carga de desprecio o sobrada intolerancia. Y, tristemente, muchas veces las hay. Es como decir que no importa insultar a alguien con el calificativo de puto o marica. Claro que importa. Es despectivo, a propósito.
Se dirá también que algunas mujeres siempre se quejan de los gustos masculinos, de cuánto los detestan. Dirán mal: espejear una actitud como esa es todo menos inteligente. Al final, Twilight es uno de esos gustos culposos que cualquiera desarrolla. Y yo diría que si una mujer les pide que la acompañen a ver Eclipse, se hagan a la idea de que es mejor ver algo digno de un coma diabético con una ración jumbo de palomitas a la mano. Ya podrán cobrársela con una dosis de balazos y patadas en otra ocasión. Y si una mujer a su lado se desborda de emoción hablando sobre el tema, no está de más preguntarse realmente por qué van a criticarla antes de lanzarse a la yugular. Digo yo.

4 comentarios:

  1. ¿Y si no soy el arquetipo de nerd que va disfrazado al cine, ni me gusta Star Wars si me puedo quejar de Twilight?

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  2. Me agrada el blog, me agrada la entrada y la crítica a los críticos de la historia, yo debo confesar que a mi si me gusta star wars, sin embargo los capitulos 1, 2 y 3 son a mi parecer malos, me fascinan las historias de vampiros y más despues de leer a Bram Stoker y ver Nosferatu y demas versiones del Dracula, claro que me gustan las peliculas sin contenido y que consideramos netamente palomeras, aunque prefiero algo que me deje algo más, me desespera la historia cursi y azucarada de estos vampiritos y lobitos, sin embargo cada quien su gusto y con limitarse a no verla ni leer el libro es suficiente, no hay porque fastidiar a las adolecentes pa quienes fueron creadas las historias.
    Recomendación, lean otro tipo de literatura y no sólo la ligera y barata, existe un gran Virgilio, Dante, Dumas, Goethe y muchos más...
    jejejejejeje

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  3. Clap, clap, clap. Soy tu fans Mon.

    Me da risa que hasta en los comments hay ese dejo de desprecio del que hablas. Whatever.

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  4. Nada de malo tiene ir al cine a explotar el instinto primario. La verdad es que el subsubsubgénero licántropos versus vampíros no ha sido bien explotado en el cine. Underworld es una megaporquería. Siempre pensé que Twilight lo lograría, pero es más bien un vehículo de explotación hormonal. Es todo. Y si funciona, kewl. Yo no las he visto, y si en los 90 no me molestaba que las teens se empaparan con DiCarpio, menos en 2010 con R-Pato y Taylor Lautner. Todos merecemos divertirnos.

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