sábado, mayo 22

1 día, 1 película

A partir del lunes, ver al menos una película por día entre semana será parte de mi día (o al menos eso me he propuesto). ¿Por qué? Porque ya me harté de ir sumando títulos a mi repisa con mejor condición de la que tengo para verlos; sea por primera vez, por segunda o por quincoagésima. Porque qué caso tiene ir coleccionando películas si uno no hace más que suspirar por algún día poder tener tiempo para ¡(re)verlas!, en lugar de buscar el espacio para hacerlo. Pero, sobre todo, lo haré porque las películas me hacen soñar, reír, viajar, llorar, enojar, me sorprenden, me transportan, me seducen, me motivan, me desgarran, me alegran, me... tantas cosas. Y mi yo hedonista ha decidido que es hora de embriagarse a diario con cocteles así, en vez de licuados de estrés y amargue oficinil. Y punto. Lo haré, pues, porque quiero y porque podré. Porque siempre se puede, y es más bien uno quien pierde el tiempo diciéndose que no. Total, está visto que ya les iré relatando qué veo y qué siento. Por lo pronto, ya sé de cierto que arrancaré semejante dieta cinematográfica con Los lunes al sol.

Y es acá donde daré cuenta de mi maratón: http://dietadeocio.blogspot.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Anda, anda, escupe...